En todo proceso de creación hay una gran verdad, y es que cuando te comprometes profundamente, el universo también se mueve.
Tenemos a la Luna en Capricornio, hoy se perfecciona en fase de cuarto menguante, marcando claramente la energía de la semana, ya que se une a la conjunción Júpiter-Plutón y todos forman una cuadratura con el Sol en Aries. La energía femenina va descendiendo y va hacia adentro. Podemos sentirnos más cansadas e irascibles. También disminuye nuestro poder de concentración.
En esta fase sacamos las conclusiones y las revelaciones que se iluminaron durante la Luna Llena en Libra y todo lo que implicó, se establecen cómodamente en la conciencia. Las relaciones ya nos vienen dando duro desde la semana pasada y van a marcar el mes de abril. Pasar tantas horas al día con nuestra pareja puede hacer que surjan roces que antes no se hubieran producido. La clave estar en procesar lo que recibimos y responder, antes que reaccionar de manera impulsiva.
Espiritualmente, es un momento perfecto para perdonar y abandonar antiguas batallas, pero también para ser prácticas y reflexionar sobre todo lo que ya no queremos en nuestra vida: relaciones tóxicas, un trabajo que no nos llena o un mal hábito. La interrupción de nuestro ritmo de vida hace que tengamos más tiempo para pensar, y muchas cosas que antes no veíamos, ahora son más conscientes, para que nos las replanteemos.
En Capricornio ponemos los pies en la tierra, vemos nuestras opciones reales y optimizamos nuestros recursos. ¿Qué sirve y que no sirve en mi vida? ¿Qué quiero y no quiero en mi futuro? ¿Qué cosas he logrado hasta ahora? ¿Qué quiero lograr? ¿Qué estructuras están ya obsoletas y quiero modificar?
La Luna está incómoda en Capricornio, y así como está ella, estamos nosotras. Podemos sentirnos frías, apáticas o caóticas. De repente ya no estamos optimistas y solo vemos obstáculos. El confinamiento se puede sentir más pesado y asfixiante. Incluso todo lo que habíamos iniciado, o los sueños e ilusiones que teníamos, nos parecen de repente menos posibles. Muchas personas se encuentran maniatadas, sin poder actuar libremente, pendientes de poder reemprender su movilidad, su trabajo, su …. vida. Si te sientes así, tranquila, la fase lunar pasará, y las circunstancias actuales tarde o temprano mejoraran.
Ten paciencia, confía en el proceso, sin controlarlo, sin contar los días.
Encuentra un lugar donde estar en soledad y permítete que hasta el caos se encuentre a gusto. Capricornio nos conecta con la tierra, con la realidad. Y a veces la realidad puede ser complicada. Aprovecha para encontrar tu centro, y sentar las bases de un compromiso a futuro con tus metas.
Todo llega a su debido tiempo, ni antes ni después. La mayoría de los sueños no se cumplen solos, necesitan de tu esfuerzo, compromiso y dedicación. Aprovecha el parón para planificar y elaborar una estrategia para tus proyectos. Capricornio es una energía de construcción, de proyección a futuro.
Sol en Aries cuadratura a Júpiter y Plutón en Capricornio.
Las cosas están calentitas allí arriba, la tensión entre la conjunción Luna-Plutón-Júpiter y el Sol en Aries así se siente. El cielo nos habla y debemos entender que lo que sucede arriba es una muestra de lo que sucede abajo, igual que nuestras circunstancias son un reflejo perfecto de nuestro interior.
La tensión del cielo se refleja en la sociedad, pero también es una invitación a realizar un trabajo individual. Si queremos que las cosas cambien, el cambio debe empezar por cada uno de nosotros. El Sol es nuestra conciencia, es como poner un foco de luz que brilla en nuestra psique, y podemos elegir cuanta luz ponemos. Podemos elegir cambiar como nos percibimos, como percibimos el mundo, cual es el significado que le damos a la realidad y cual es nuestro enfoque. Cuando todo lo que conocemos está cambiando, ¿qué otra opción tenemos?
Se trata de ser quien somos, de crear y compartir esa autenticidad con el mundo. Mostrarnos como somos con coraje. En momentos en que nos sentimos desesperanzados y sumidos en la desesperación colectiva, debemos recordar lo que significa ser un individuo. El mensaje del cielo es claro: recordar quienes somos para recuperar nuestro poder. Cuando nuestro poder interno aumenta, disminuye el poder de fuera. La tensión es cardinal (Aries-Capricornio), y nos habla de ambición y motivación. Pero no se refiere a trabajo, sino a encontrar algo que amas, que te llena el alma. Ese tipo de cosas que podrías estar haciendo todo el tiempo, sin distracciones. ¿En que comprometes tu energía? ¿Qué cosas podrías estar haciendo horas y horas sin cansarte? ¿Qué es lo que te produce tanta alegría que quieres pasar cada momento inmerso en ello?
Quizás ha llegado la hora de investigar esto y atrevernos a establecer un profundo compromiso con nosotros mismos y con lo que realmente queremos hacer, porque es lo que nos hace feliz y nos llena.
La transformación es un proceso necesario.
La transformación no es un lugar amable, es caótico y una fuente de conflicto interior porque no es un lugar “seguro”, sino un lugar de crecimiento; un lugar de renacimiento donde puedes reiniciar y alinearte con quién eres.
Aunque es un ejemplo muy manido, podemos aprender mucho de la oruga, a la que le crecen las alas de mariposa en el aislamiento, en el dolor y en la oscuridad de su capullo; y renace, hermosa y libre, con alas para volar. Ella en su interior tiene la “certeza” de que el proceso que esta produciéndose en ella, la llevará a renacer a lo que estaba destinada a convertirse. Y no opone ninguna resistencia, simplemente se sumerge en la oscuridad más profunda hasta morir ¿Pero realmente muere? La muerte no existe, solo existe la transformación.
Todas las personas, en mayor o menor medida, pasan a lo largo de sus vidas por alguna situación de intenso dolor y sufrimiento. En ese proceso, es donde pueden emerger las partes más auténticas y verdaderas de ti, y donde ocurre la perfecta transición al lado más intuitivo y vibrante de ti misma. Resistirse al orden natural de que todas las cosas cambien, origina en tu experiencia lo que sientes como estrés, y el estrés genera malestar. Si no te resistes a lo que realmente eres, y a lo que simplemente es, serás libre para evolucionar y conectar con las infinitas posibilidades del mundo 🌟.
