No te atrevas a encogerte para que otra persona se sienta cómoda. No te vuelvas pequeña por alguien que se niega a crecer.
Saturno entra retrogrado hoy 11 de mayo en el grado 1 del signo de Acuario, el día 13 lo hará Venus y poco después, concretamente el día 15 también lo hará Júpiter, en el grado 24 del signo de Capricornio. El viejo maestro ha comenzado su viaje hacia atrás y volverá a ingresar en Capricornio en el mes de julio. De julio a diciembre continuará en su tránsito por Capricornio para mudarse a Acuario de nuevo a finales de 2020, donde permanecerá aportando sus lecciones hasta 2023.
Júpiter, Saturno y Plutón entrarán directos prácticamente a la vez, entre el 13 de septiembre y el 4 de octubre. Y desde esa fecha y hasta final de año volverán a estar juntitos de nuevo, en el grado 4 de Capricornio haciendo una tensión algo peliaguda con Marte, que por esas fechas también estará retrógrado. Es como si fueran hacia atrás pero solo para coger impulso y es en este final de etapa donde lo darán todo. Será cuando se vuelvan a poner directos que veremos con mayor claridad las conclusiones de todo el proceso mundial que estamos viviendo. Pero vayamos con Saturno que es el que nos toca.
Debemos coger el timón del barco.
Saturno es el guardián de la frontera entre lo personal (lo que creemos que somos o el yo pequeño), y lo transpersonal (lo que en esencia somos o el yo verdadero). Es el gran maestro que nos dice que “lo que podemos ser, lo debemos ser”, y nos empuja a ello. Su retrogradación nos invitará a hacernos preguntas incómodas:
“¿Estoy dando lo mejor de mí?”
“¿Qué cosas estoy logrando?”
“¿A qué he venido a este mundo?”
Muchas veces por más dolorosa, frustrante e incómoda que pueda ser nuestra vida, nos aferramos a ella porque es lo conocido, en lugar de abrirnos a algo nuevo. Nos han enseñado lo que es la autoridad, nos han dicho como “comportarnos”, nos han limitado, nos han metido en “moldes”, nos han bajado a la “realidad”, nos han dicho que dejemos de soñar….
Nos dijeron “eso es imposible”, nos metieron sus propios miedos y taparon nuestra “luz”. Consiguieron que encajáramos en el mundo, realmente lo consiguieron. Ahora tenemos miedo a ser lo que realmente somos, tenemos miedo a Ser. Saturno nos pone límites para que nos esforcemos en superarlos. Es cuando la frustración se hace insoportable y nos sentimos derrotadas, que descubrimos que dentro de nosotras hay una magia y un poder que ni siquiera imaginábamos que teníamos. Saturno es la puerta pero también es la llave de todo el potencial que somos.
Quizás ahora sea el momento de dar lo mejor de nosotras mismas y retomar las posibilidades que dejamos atrás para encajar con la opinión de la mayoría. Debemos encontrar nuestra propia voz, decidir quienes somos e irradiar nuestra natural autoridad al mundo. Pasar de ser seguidoras a líderes. Saturno es el maestro que nos empuja a que nos responsabilicemos, a que trabajemos en nosotras mismas para superarnos y lograr metas más elevadas, para continuar por el sendero de la realización.
Poner sanos límites.
Saturno también nos invita a revisar nuestros sanos límites y no tolerar que nadie nos disminuya para sentirse cómodo. Muchas veces nos ocultamos y nos hacemos pequeñitas de forma inconsciente para que los demás no se sientan inseguros. Salimos al mundo y nos ponemos una máscara para que nos quieran y acepten.
La conclusión que podemos sacar es que la retrogradación de Saturno es muy positiva para todas. Quizás esta alteración que estamos sufriendo sea positiva y que nos ayude a reflexionar sobre muchas cosas. Vamos a escuchar las sabias lecciones que siempre nos propone Saturno.
¡Que tengáis una feliz semana! 🌻.
