Mañana 16 de febrero tenemos Luna Llena a 27º del signo de Leo, y damos por culminado un proceso que se inició el pasado mes de agosto de 2021, con la Luna Nueva en este signo.
La Luna está en frente del Sol durante el plenilunio, en un ángulo de 180º, y de manera excepcional, esta vez no realiza ningún otro aspecto relevante que desvíe la atención (a excepción de un quinquncio a Plutón).
Leo es un arquetipo de Fuego, fijo con una cualidad Yang o masculina. Cuando las Lunas Llenas suceden en los signos de Fuego, canalizar la intensa energía emocional en actividades que impliquen mover el cuerpo, puede ser muy útil para encontrar un equilibrio interno. Cualquier trabajo artístico como escribir, pintar, bailar, cantar y tocar música, puede tener un efecto calmante y restablecedor de nuestro estado anímico.
Leo es el signo del Sol, el astro que nos da calor, que nos aporta vida. Leo es la fase del zodiaco en la que desarrollamos una identidad diferenciada. Conectar con el Sol es reconocernos a nosotras mismas en nuestra auténtica esencia. Por otro lado, Acuario es el signo de Urano, el planeta que busca que reconozcamos nuestra singularidad, eso que nos diferencia y nos hace únicas.
Esta lunación nos lleva a aprender podemos integrar nuestra diferencia dentro de un grupo, aportando nuestra creatividad personal al servicio de esa comunidad, pero sin perdernos a nosotras mismas.
¿Cómo podemos hacer lo que amamos y ser fieles a nosotras mismas, y al mismo tiempo, adaptarnos a lo que nos pide el grupo, a las nuevas tecnologías y a las nuevas tendencias sociales?
Yo llevo unos días dando vueltas a esto y en seguida lo he asociado con el eje de Leo y Acuario, que es el que se activa en esta lunación. Algunas personas tienen claro lo que quieren hacer y lo que desean mostrar a los demás. Saben que es eso que los mueve y con lo que sintonizan a un nivel interno. Todas deseamos hacer lo que amamos y vivir de nuestra pasión. Pero cuando emprendemos, nos damos cuenta de que, para darnos a conocer, tenemos que integrarnos en redes.
Estamos en la era de Acuario y no solo sirve con ser auténticas y saber que tenemos mucho que aportar, tenemos que adaptarnos al nuevo sistema que se ha creado con las nuevas tecnologías y las redes sociales. Dependemos de cosas que muchas veces pueden chocarnos porque nada tienen que ver con nuestro trabajo, pero que tenemos que dominar porque sino no lo hacemos, nos quedamos rezagadas. Un ejemplo son las complejas estrategias de marketing online para vender o seguir subiendo en redes. Esta claro que tenemos que adaptarnos a las nuevas tecnologías, pero no debemos traicionar quienes somos durante el proceso.
Esta Luna va de diferenciarnos, de encontrar eso que realmente nos hace únicas y de poner nuestro sello personal en lo que hacemos. Cuando perdemos la motivación, hay que investigar si estamos traicionando nuestra esencia y haciendo cosas que realmente no queremos hacer. Otras veces, si tenemos falta de confianza en nosotras mismas, el entusiasmo disminuye, e incluso, nuestros proyectos pueden mostrarse sin fuerza, porque puede haber una parte nuestra que evita destacar, por miedo e inseguridad personal. Para solucionarlo hay que salir de nuestra zona de confort y dejar de pasar de puntillas por la vida. Es importante dejar a un lado las dudas, y atrevernos a decir “esto es lo que yo hago”, “esto es lo que soy”, aunque resulte complejo. Solo así podemos brillar.
Leo es el signo de la imagen y en este momento estamos rodeadas de imágenes de personas que nos muestran un ideal de vida exitosa. Nada es perfecto, todo lo que vemos es solo es una apariencia. Mantener esa imagen que muchas personas se crean para ser admiradas es muy costoso a largo plazo. Muchas personas se presionan a sí mismas para adoptar el estilo de vida o el proyecto que creen que es más radiante, aunque no tenga nada que ver con su propósito. Acuario nos invita a quitarnos ese peso y a vivir libres de todo condicionamiento externo, renunciando a las máscaras que ensombrecen nuestro verdadero yo. Si nos enfocamos en vivir la vida de otra persona, estamos renunciando a la verdadera vida, esa que el universo tiene reservada para cada una de nosotras. Acuario y Leo son dos signos opuestos y complementarios, dos caras de una misma moneda. Fluir en ambas energías implica renunciar a lo que nos identifica para renovarnos y encontrar algo aún más auténtico.
Esta Luna Llena también es un momento para agradecer, algo que nos ayuda a irradiar la energía del corazón, que tiene mucho que ver con Leo. También, para sentirnos orgullosas de nosotras mismas y ser nuestras mejores admiradoras. Si hemos perdido el entusiasmo, es el momento de reconectar con esas cosas que nos hacen felices, de hacer lo que nos late, de permitirnos disfrutar más allá de las cosas que tenemos que resolver: la agenda, el pago del alquiler, la organización diaria o los problemas que van surgiendo. Es el momento de ceder cualquier carga que tengas al universo y enfocarte en ti, ganando espacio y libertad. En definitiva, volver a estar cerca de ti misma.
¡Feliz Luna Llena!
