La Luna Nueva se perfecciona en el grado 23 de Escorpio y sin lugar a duda, es el evento estrella del fin de semana. Se trata de una Super Luna y es la tercera de este año. Una Super Luna es una Luna Nueva o Llena que sucede más cerca de la Tierra, y, por lo tanto, la atracción gravitacional es mas fuerte, otorgando una mayor intensidad al evento.
Esta Luna Nueva nos está preparando para la temporada de Eclipses que está a punto de acontecer, que comenzará con un Eclipse Lunar penumbral en Géminis que tendrá lugar el 30 de noviembre. La próxima Luna Nueva será un Eclipse Solar Total en Sagitario, que tendrá lugar el 14 de diciembre.
Luna Nueva: Nueva tú
Cada vez que hay Luna Nueva en el cielo es un momento muy especial del ciclo lunar, porque podemos detectar esas cosas que ya no dan más de sí en nuestras vidas y descubrir qué es lo que necesitamos impulsar a partir de ahora. La Luna Nueva representa un momento más interno, sus efectos no son tan visibles como la Luna Llena, es un periodo de interiorización y reflexión. La Luna de por sí, representa el inconsciente y nuestro mundo emocional, es como un gran baúl de memoria en el que guardamos las marcas de nuestras vivencias.
Por lo tanto, una Luna Nueva en Escorpio amplifica de forma extraordinaria esta fase. Cuando la Luna cae en este signo, es especialmente potente y transformadora. Un auténtico flujo de energía sanadora que es capaz de transformar el dolor y el sufrimiento en un caudal de libertad y amor.
No importa cuán grandes o pequeños sean los procesos que abramos o cerremos durante estos días, lo importante es poner atención a todo lo que ya no tiene valor, está agotado, estancado y ya no puede evolucionar más. Una vez reconocido todo esto, la luna funciona como un momento semilla, en el que plantamos todo lo que a partir de ahora queremos manifestar.
Escorpio: intensidad y pasión
Escorpio es un signo que me fascina, porque es capaz de las mejores posibilidades o de las perores. Es intenso y apasionado. Tiende a vivir las cosas en extremo “todo o nada” y es capaz de ver en la oscuridad: las intenciones escondidas de la gente, los deseos más ocultos, lo que hay más allá de las apariencias. Todo esto es su mundo, su ambiente. Por eso es tremendamente intuitivo, es capaz de saber lo que estás ocultando. Vivir así naturalmente no es fácil, y la persona Escorpio suele ejercer una presión consciente sobre su natural forma de ser, al no resultarle fácil mostrar la intensidad de sus deseos y sentimientos a los demás.
El trabajo con la Luna Nueva en Escorpio
La Luna Nueva de Escorpio está irradiando su intensidad de manifestación. Una luna poderosa que nos da la oportunidad de ir hacia adentro para reconocer nuestros miedos y encarar nuestras excusas: esas veces que echamos balones fuera para no hacer lo que debemos hacer.
La energía del momento nos muestra cualquier bloqueo interno que no nos permita manifestar nuestros sueños o cualquier situación en la que nos sentimos vulnerables y por lo tanto evitamos. ¡Cuántas veces nos mentimos a nosotras mismas para no afrontar lo que nos duele!
Es hora de reconocer lo que no está bien y cambiarlo. A veces son procesos externos o situaciones muy objetivas y palpables; en otras ocasiones simplemente son actitudes y hábitos muy inconscientes que tenemos y que no hacen otra cosa que sabotearnos y condicionar nuestra vida.
No podemos cambiar nada en el exterior si previamente no cambiamos por dentro. De eso se encarga la energía Escorpio. Y no nos engañemos, a nadie nos gusta meternos en esas profundidades, porque a veces no sabemos lo que nos vamos a encontrar, y lo que descubramos puede ser realmente doloroso. Cuando estamos dispuestas a hacer el cambio, debemos estar preparadas para que muchas circunstancias, situaciones, trabajos o personas con las que nos relacionamos se vayan, porque ya no pueden acompañarnos. Ese es el precio de crecer, algo a lo que el Ego se resiste con todas sus fuerzas, pero es la única manera de salir del estancamiento y dejar de repetir una y otra vez las mismas situaciones.
Trígono de Agua con Neptuno
El Sol y la Luna en Escorpio están formando un hermoso trígono de agua con Neptuno retrógrado en Piscis, un aspecto que enfatiza y aumenta nuestra intuición, resonancia e inspiración. Además, podemos estar más empáticas con el dolor y sufrimiento ajeno, más conectadas a nivel profundo con todos los seres y más sensibles a lo que nos rodea.
Un momento para conectar con nuestro guía interno y encontrar las respuestas que buscamos. Una alineación que nos recuerda que no hay coincidencias, sino sincronicidades, y que tenemos que estar alerta para interpretar las señales. A veces los mensajes llegan de formas inesperadas o muy sutiles.
Mercurio directo de nuevo en Escorpio
Estamos en una de las semanas clave del mes, los planetas están apoyando nuestro movimiento hacia el futuro, ayudándonos a deshacernos de lo que cumplió su propósito, de lo que perdió su sentido y significado.
Mercurio, el planeta del pensamiento, de la comunicación y del intercambio de información, ha entrado de nuevo en las aguas profundas de Escorpio, por segunda vez en este año. Durante su tránsito encontramos una comprensión psicológica de nosotras mismas y de los demás. Hay una mayor tendencia a querer descubrir lo que permanece oculto y las percepciones y la sabiduría obtenida puede ayudarnos a resolver viejas heridas, miedos o traumas. También buscaremos una comunicación más profunda, intima y honesta, ideal para retomar conversaciones importantes. Buscaremos hablar con personas interesantes ¡nada de conversaciones superficiales.
Mercurio en Escorpio es poder en la palabra, es decir, lo que digamos o expresemos tiene el potencial de transformar cualquier situación. Importante que todo lo que salga de nuestra boca sea adecuado y positivo para nosotras y lo que nos rodea. También nuestros pensamientos serás más poderosos, elígelos sabiamente. El planeta de la mente y la comunicación nos ayuda esta semana a poner fuerza y poder en las intenciones que proyectemos. Recuerda crear tu tablero de visión para manifestar todo lo que desees.
El tránsito es ideal para trabajar en cambiar nuestra interpretación de la realidad. Por otro lado, será muy difícil engañarnos o autoengañarnos, nuestro instinto se amplificará y también veremos con mayor claridad las mentiras que nos contamos a nosotras mismas. Encontramos una renovada fuerza de voluntad y motivación para ir a por lo que queremos sin distracciones.
Un periodo ideal para iniciar terapia psicológica y astrocoaching con tu Carta Natal para detectar patrones inconscientes. Lo que descubras puede ser algo que deje una impronta significativa en tu vida y quizás sea la semilla del cambio que esperas.
Plutón y Júpiter, última conjunción
Júpiter y Plutón se vuelven a unir en Capricornio por tercera y última vez en este año. Que estos Planetas se junten en el cielo es un hecho muy relevante, ya que solamente lo hacen cada 12-13 años y hasta 2033 no se volverán a encontrar, esta vez en el signo de Acuario.
Es un momento para reflexionar sobre todo lo que está cambiando y darnos cuenta de que todo lo que pasa es necesario para vivir una vida más auténtica y en sintonía con quién somos. Y aunque estamos cansadas de lidiar con tanta densidad, es posible, que a partir de este momento empecemos a confiar cada vez más en nosotras mismas y en nuestro nuevo proyecto de vida.
El tránsito viene a transformar nuestro sistema de creencias y los ideales con los que nos hemos conducido hasta ahora. Esta conjunción nos invita a conectar con nuestro poder personal y decidir conscientemente finalizar ciclos que están agotados y no pueden evolucionar. Plutón destruye lo que ya no sirve, a lo que estamos apegadas, dejando de lado nuestro verdadero potencial. Júpiter nos invita a ser lo que estamos llamadas a ser, rompiendo con rígidas estructuras y con condicionamientos impuestos por la sociedad.
Cuando sanamos, las cosas que antes nos generaban atracción cambian, de repente son menos interesantes y ya no aportan ni sentido ni significado a nuestra vida. Plutón está sacando a lo superficie todo lo que ya no tiene valor, todas nuestras justificaciones y nuestros miedos, para que los transmutemos. Cuando lo hacemos, somos capaces de ampliar nuestra visión y conectamos con el deseo de aspirar a más de lo que somos y de hacer lo que nos entusiasma.
Luna Nueva en sextil a la triple conjunción
El Sol y la Luna en Escorpio están formando un sextil con Plutón, Júpiter y Saturno en Capricornio: esta configuración promueve un fácil intercambio de información.
Esta Luna Nueva representa el broche final de todo el proceso que hemos estado viviendo este año, ya que la intensidad de la triple conjunción finalizará en diciembre. Un año que ha desafiado nuestras más básicas condiciones de seguridad y forma de vida.
Los tres planetas estarán muy juntitos estos días por última vez, por lo que es el momento de sacar en claro que es lo que hemos aprendido en este año y de la respuesta que obtengamos sembrar lo nuevo que queremos que florezca, desde una nueva visión y un nuevo enfoque.
Marte directo en Aries: valor y voluntad
Acompañando a la Luna Nueva, Marte estaciona por fin directo en el grado 15 de Aries, aunque estará estacionario hasta el 24 de este mes. A partir de ese día notaremos como nos llenamos de ganas de avanzar hacia adelante con valor y voluntad. La retrogradación planetaria está cediendo, y las cosas empiezan a moverse.
Ya desde hoy podemos sentirnos con una mayor claridad para tomar decisiones e iniciativas y un mayor entusiasmo para hacer lo que deseamos. Las dudas se empiezan a disipar y adquirimos una mayor seguridad para lanzarnos a nuevos proyectos. Estaremos más seguras con respecto a la dirección a seguir y en qué enfocar nuestra energía. ¡Que mejor momento para proyectar nuestras iniciativas!
Durante su retrogradación se ha podido acumular una gran cantidad de frustración y tensión interna por no poder avanzar como nos gustaría. También hemos podido notar dudas y dificultades para poner en marcha proyectos. Todo esto se va a ir solucionando, la energía masculina se está moviendo hacia adelante. Salimos de su retrogradación quizás con una mayor claridad de cómo queremos manifestar nuestra energía de acción y empuje en el mundo, superando las expectativas sociales de cómo y dónde debemos emplear nuestra energía.
Marte seguirá en Aries, el signo de su domicilio, hasta el 6 de enero de 2021, enfatizando nuestra necesidad de independencia. Durante su tránsito será más fácil seguir el impulso que nace de nuestro interior sin ninguna restricción ni límite. Así que adelante con lo que sea que … ¡tu puedes! 😉
En definitiva, ya no podemos ponernos excusas, es hora de enfrentar nuestras mentiras e ir hacia lo desconocido. El miedo no es una opción, estamos juntas en esto 💜.
